miércoles, 18 de septiembre de 2013

DESARME RECÍPROCO...¿nadie lo exige?

 

        

Armas químicas, hoy.

   Se está llevando a cabo un debate mundial, encabezado por las dos grandes potencias que mantuvieron una "Guerra Fría" por varias décadas, sobre la destrucción de armas químicas en Siria. Nos parece muy importante, que se discuta esta posibilidad al nivel que se viene haciendo hasta ahora, y nuestras esperanzas están depositadas no solamente en que finalmente así se haga, sino que el debate continúe. Que se continúe debatiendo sobre la destrucción de estas terribles armas en todo el mundo. En Arabia Saudita e Israel - por nombrar a dos países directamente involucrados en el conflicto - debe desaparecer todo vestígio de esas letales amenazas para la población civil.
   Actualmente, es vergonzoso el estilo del Arte de la Guerra. Entre armas químicas y nucleares; misiles de largo alcance y Drones, ya puede rebautizarse de Arte de la Cobardía. 
  
 Nadie, a estas alturas, se traga la pastilla de que Rusia ha logrado retardar un masivo ataque occidental sobre la nación árabe de Bashar Al-Assad, motivado por razones humanistas (solamente). Sabemos que Putin, protege intereses económicos propios de Rusia y a dos aliados estratégicos (Siria e Irán) muy poderosos en esa región. Si no fuera por estos motivos...¿estaría tan interesado en evitarlo? 
  Lo único que nadie puede negar, y a la vez criticar del gobierno ruso, es que gracias a esos intereses, más de un millón de civiles de todas las edades logró escapar de la zona amenazada. Seguirán viviendo gracias a Rusia.
  La ONU y la Convención de Ginebra, creadas con el supuesto e irónico fin de hacer la vida más pacífica y las guerras menos injustas, ya son el hazme-reír del Planeta. Nadie les tiene confianza, ni se espera que sus resoluciones sean del todo coherentes, ni que las potencias las respeten. Existen por inercia. 

 Desarme recíproco
  
  Esto, sería lo único que todos los habitantes de la Tierra aplaudirían - a excepción de algunos Psicópatas -. Tampoco vamos a caer en el simplismo de soñar con un mundo "0 armas". 
  Pero el desarme recíproco, debe hacerse con esas armas "mata-civiles". Si tiene que haber efectos co-laterales - que desde que los seres humanos existen, siempre los hubo - que sean efectivamente eso: sin poder evitarlo. Que las masacres de personas inocentes nunca más sean una estratégia desmoralizadora, sino delitos de lesa-humanidad, castigados con la Pena de Muerte (estilo Nüremberg), sin importar a quienes benificie.
   Que todos aquellos, que amen a las armas, a las guerras y a la muerte, demuestren su coraje y "valentía" creando campos de batalla donde las únicas víctimas sean los combatientes. ¿Acaso no es así, que lo plasman en sus obras cinematográficas".
   La sociedad que demuestra esas dos virtudes, paradójicamente es la sociedad civil, que sale con las manos vacías a enfrentarse con los  Robocops, cuando tiene verdades para gritar públicamente y a exigirles a los burócratas que respeten sus derechos.
   El desequilibrio de fuerzas entre las potencias bélicas y económicas, parece haberse estabilizado, por lo menos, en lo referente a Medio Oriente. Mucha agua habrá de correr en este río, antes de que puédamos comprobarlo.  
  La esperanza prevalece, al final, es lo último que se pierde.


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    Walter E. Carena
    Twitter: @wcarena