lunes, 29 de octubre de 2012

  ¡Dejad las armas!  Nunca el ideario Revolucionario.  

 
Gabriela Cárdenas (FARC-EP)

 
Imágenes extraídas de Google.

           
  Comandante Daniel Ortega        Presidente Daniel Ortega
  
Escuchando a Daniel Ortega, Presidente de Nicaragua y ex-guerrillero - tan revolucionario como en la época de la guerrilla -, comprobamos que es posible deponer las armas, pero no el ideario fundamental del guerrillero revolucionario. El Comandante  Daniel Ortega que lideró la Revolución armada, es el mismo que hoy - sin armas - gobierna Nicaragua - a través de las urnas -; su discurso y sus objetivos no han cambiado.
   No se flexibilizó ante los oligarcas criollos o gringos, para mantenerse en el Poder, o insertar a su país en la globalizacióm capitalista y poder aparecer en el Wall Street Journal, como modelo del socialismo moredado, que no es otra cosa que Socialismo Claudicado, o ganarse una silla de observador en el Consejo de Seguridad de la ONU.
 José Mujica (Uruguay) - Dilma Rousseff (Brasil)
   Estos guerrilleros, no conservaron la virtud revolucionaria fundamental. Lo que lleva a preguntarse: ¿Será por eso, que el "Nuevo Orden Mundial" aplaude sus gestiones, al frente de sus países? ¿Será por eso que se resisten a tomar medidas más radicales - al estilo de H. Chávez, D. Ortega, E. Morales y R. Correa - en lo que tiene que ver con Obras Sociales e independencia externa?
   Para quiénes soñamos con la Patria Grande, Justa, Solidaria y Socialista, nos deja un sabor desagradable en la boca, esta constatación, pues de los cuatro países de estos gobernantes señalados en negrito, Venezuela es el más rico, por lejos. Y por lejos, es el  elegido por los gobernantes ex-guerrilleros de Brasil y Uruguay, para comerciar e intercambiar obras de infraestructura, desplazando, en cierta medida significativa, a los tres restantes  más pobres. Ese acercamiento con Hugo Chávez, ¿es afinidad ideológica, o conveniencia económica?
   Es difícil de responder esta última pregunta (¿lo es?), será necesario prestar más atención a las idas y vueltas, dimes y diretes de los Presidentes en cuestión, y tal vez después, la respuesta salte a la vista.
  Walter E. Carena
  Twitter: @wcarena